Seductor otoñal con dentadura postiza

 


Seductor otoñal con dentadura postizaORTOLÀ PÉREZ, AntoniZaragoza, 2023Encuadernado en rústica. 176 páginas, 15x23 cm. - (Sueños de tinta, 102)978-84-8465-591-6PVP 16.00 €Comprar en Librería Central
«Transcurrieron las siguientes jornadas en un estado melancólico. Tomando cafés con leche en los bares de las esquinas. Observando a los jóvenes. Ellos sí que tenían suerte. Le dio por ir calculando la edad de cada individuo que se tropezaba por la calle. Era cierto, él tenía todo el cabello, ni una cana, pero ¿cómo podía considerarse joven un hombre con dentadura postiza y pastillas para la tensión? Su carrera de seductor por los suelos. O lo que era casi peor, de la noche a la mañana, se había convertido en un seductor otoñal, con lo mal que sonaba. Se le veía pasear por la Alameda cabizbajo, derrotado (...). Parecía el protagonista de una soberbia historia de amor que acababa de perder a su amada (...). Eso sí, el tupé impecable».

Cosme el Sonrisas, el protagonista (antihéroe y trasunto de Georgie Dann, indiscutible rey de las canciones del verano) de esta novela de humor «explosivo», es soltero de vocación y rentista, y su única ocupación consiste, desde joven, en seducir mujeres, actividad que le obsesiona hasta el punto de anotar en un cuaderno —la Libreta de Oro— todos sus ligues, con balance anual incluido (el Año Discotequero, el Año Triunfal, el de la Crisis, el del Segundo Renacimiento...).

Seductor otoñal con dentadura postiza arranca con el secuestro fortuito de Cosme por unos delincuentes y su inmediata fuga y persecución,una mañana durante el verano de 2008, en plena crisis de los cincuenta. El periplo aventurero, en medio de una guerra entre bandas de malhechores y policías, no le impedirá continuar con su rutina mujeriega. Los escenarios se van sucediendo con ritmo trepidante desde Valencia, la ciudad del Sonrisas, hasta Barcelona y Perpignan, a la vez que se incorporan personajes que acompañarán en perfecta y afinada coreografía a nuestro seductor compulsivo en un enredo sin tregua.

Con una prosa fluida y una clara intención cómica, Antoni Ortolà utiliza hábilmente múltiples elementos y recursos para que el humor atraviese la novela de principio a fin, salpicando un capítulo tras otro con esa mezcla «mendoziana» de ironía y parodia. Sabe aprovechar —de un modo inteligente— todas las posibilidades que el lenguaje ofrece para dibujar una imagen de la realidad desde una mirada desenfadada. La tensión dramática, la transgresión y un sentido del humor tan hilarante como sentimental hacen de esta novela un brillante ejercicio literario.


· Descargar ficha