Meluca y el extraño caso del gigoló complaciente

 


Meluca y el extraño caso del gigoló complacienteGONZALEZ USÓN, PilarZaragoza, 2020Encuadernado en rústica. 288 páginas, 15x23 cm. - (Sueños de tinta, 86)978-84-8465-558-9PVP 19.00 €Comprar en Librería Central  
«Adoro los misterios. Hay partes que parecen no encajar, pero al final lo hacen y todo cobra sentido». Esta frase, pronunciada por Cheryl, la protagonista femenina de la película La vida secreta de Walter Mitty, podría describir la trama de la nueva novela de Meluca, esa mujer «espléndida en su madurez que se niega a ser una anónima ama de casa y una mediocre jugadora de bridge».

Detective aficionada, viene a sumarse hoy, por derecho propio, a esa larga lista de mujeres inspectoras de policía, juezas, guardiaciviles, investigadoras de fraudes... que protagonizan los títulos de la mejor novela negra actual de autores españoles y arrasan entre los lectores. Sin embargo, Meluca Solanas de Escauriaza no es Amaia Salazar, ni Mariana de Marco, ni Gracia San Sebastián, ni Martina de Santo..., Meluca es todas ellas y ninguna. Su personaje, más ingenuo en su debut (Asesinato en el club de bridge, Mira, 2013), sufre y disfruta, ata y desata cabos, se entrevista con los sospechosos, o con su círculo más cercano, va y viene, sin que el peligro la intimide... hasta descubrir quién mató al marqués de Senillosa, la primera víctima de una larga serie de asesinatos en los que se verá involucrada. Tras su estancia en la cárcel, Meluca retomará las riendas de su vida en ¿Crímenes perfectos? Meluca y el caso del bridgista asesino (Mira, 2016), decidida a seguir apurando «la vida al máximo, con pasión, porque “lo importante en esta vida no es que ganes o pierdas, sino que no pierdas las ganas”».

En esta nueva entrega que cierra la trilogía, Meluca y el extraño caso del gigoló complaciente, en la que el misterio, la novela costumbrista y el humor vuelven a componer, a modo de cubo de Rubik, un sólido entramado narrativo, la autora consigue, con la competencia intelectual de una buena jugadora de bridge, que «cada mano sea una aventura», cada escena, un desafío, y cada descubrimiento, un secreto revelador. Conoceremos a Tony, un gigoló francés educado y complaciente, a Clara Montenegro, psicóloga de la prisión de Zuera, y a María Ostáriz, la joven de dieciséis años desaparecida en plenas fiestas del Pilar. Meluca y el comisario Villarroya, sustituto del recordado Cornejo, nos ayudarán a comprender la tragedia que encierran sus vidas y a resolver, por diferentes caminos, la investigación, una vez desveladas las conexiones entre los distintos crímenes.

Puntos de vista de los personajes, versiones, anécdotas, trampantojos, vueltas de tuerca, revelaciones, sospechas… van conformando este gran tapiz/ patchwork en el que la autora elige todo aquello que cohesiona el relato, con el afán de contar una historia que entretenga, divierta, emocione, en definitiva, que haga disfrutar al lector. Y, sin duda alguna, lo consigue en esta trilogía con ritmo, instinto, coherencia… y un universo propio que hacen de Meluca un personaje inolvidable, y de Pilar González Usón, una escritora necesaria.


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